domingo, 5 de junio de 2011

INFANCIA ESPIRITUAL



F. Padre, te pediría muchas cosas. Pero ninguna de ellas llenaría mi corazón más que Tu Amor. En este día te pido Alegría y Salud.

P. Todo es regalo de Mis manos. Si no te costó nada obtener lo que tenés, ¿por qué preocuparte? ¿Acaso el preocuparte arreglará las cosas?

F. Entonces, ¿qué hago?

P. Hacé como las criaturitas, que hacen lo que sienten sin pensar mucho. Yo te bendigo hija chiquitita. SOY TU PADRE Y TE AMO.

Mi hijita quiere ser grande y hacer cosas que hacen los grandes, pero no comprende del todo todavía que es muy pequeñita.

F. Regálame entonces la infancia espiritual que tanto te agrada.

P. Vas por ese camino. Además tienes una Madre. ¿Por qué temer?

Por la tarde, Jesús quiere estar un rato conmigo y yo también.

F. Hola, Amigo mío. ¿Charlamos un rato?

J. Me gusta ser tu Amigo. Reunirme contigo. Darte Mi Amor. ¿Estás contenta con el caminito que te estoy trazando junto con Nuestra Madre?

F. Me gusta mucho. Parece un juego de niños.

J. Lo es, en realidad. El Hermano Mayor juega con su hermanita más chiquitita. Así será por siempre. ¡De fiesta para siempre! Aún en las contrariedades. Yo te voy a dar Mi Alegría.

F. Ahora entiendo por qué ayer al cerrar los ojos la Madre me regaló al Niño. En ese momento no comprendí. Sólo vi que Ella me lo entregaba. ¡Es mi hermanito! ¡Es hermoso!

Ahora mi hermanito Jesús quiere darme a conocer Su infancia. Puedo entender cuando El dice: que si no nos hacemos como niños no entraremos en el Reino. Porque el Reino ya está entre nosotros. Tenemos que descubrirlo. Sólo los pequeños lo logran.

Veo al Niñito Jesús sentado conmigo en un tronquito. Él tiene dos o tres años más que yo. De repente comienzo a llorar y Él me toma de la mano y me lleva donde la Virgen. Sollozando le digo: "Quiero ir con mi mamá".

Ella entiende que sufro porque mi mamá murió. Me dice (abrazándome fuerte sobre Su corazón): "Yo soy tu mamá".

F. JESUS, TE AMO. Como hombre, como niño. Como hermano. Como mi Amado. Como mi Esposo. Y aunque soy poca cosa, es decir nada, te doy lo poco que tengo. Jesús, estoy cansada.

J. Entonces, Yo te tomo entre Mis brazos y hacemos una pausa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario